Habitantes de la parroquia El Cisne, preocupados por el estado y condición de las personas que sufrieron las consecuencias del terremoto que afectó la Costa ecuatoriana, colaboran con la donación de productos no perecibles. Carlos Obaco, encargado del circuito 21 de la Policía Nacional de El Cisne, resalta que los víveres serán entregados a los damnificados.
Las autoridades locales, encabezadas por el teniente político, Francisco Carrión, y la policía nacional, recogen donaciones en toda la parroquia con la total colaboración de la ciudadanía.
A esto se suman los aportes económicos de las personas religiosas, que están siendo depositados en una urna de la Iglesia, el Padre José Avaristo párroco de El Cisne, hace referencia.
“Los que tienen buen corazón como algunos peregrinos hechan sus centavos, diariamente se revisa las donaciones, se prevé continuar con estas acciones por aproximadamente tres meses”, manifestó.
“Pedir por los hermano que están sufriendo a causa del epicentro en la Costa, que Dios los fortalezca” son las palabras de Clemencia Bravo, habitante del lugar.
Los moradores del sector se unen para aportar mediante estas acciones en beneficio de los perjudicados por el terremoto de 7.8 grados en la escala de Ritcher que afectó a Ecuador.