La noche del martes 21 de febrero, las instalaciones del Museo de las Música del Municipio de Loja fue el escenario del acto de reconocimiento al maestro Galo Terán Arteaga, el evento se desarrolló con un auditorio totalmente lleno de familiares, amigos y ciudadanos que gustan del talento del guitarrista de origen riobambeño.
Luego de dar lectura a la biografía y gran trayectoria del homenajeado, inició el acto formal con la participación del Alcalde de Loja, José Bolívar Castillo, quien resaltó las virtudes de Terán y la responsabilidad institucional de reconocer la valía de grandes hombres que han aportado a la cultura y trayectoria musical de la ciudad… Además, el burgomaestre lojano, entregó un acuerdo de reconocimiento.
Por su parte el hijo del homenajeado, Galo Patricio Terán, agradeció al Municipio de Loja por considerar a su padre para ser reconocido por sus cualidades artísticas. Sostuvo que a pesar de las incomodidades que tiene su padre en la mano derecha, luego de sufrir un accidente, aún sigue creando nuevas piezas musicales, cuya inspiración es la tierra que lo acogió la castellana ciudad de Loja.
En la segunda parte del evento el homenajeado interpretó algunas piezas musicales, demostrando que aún hay guitarrista para rato. Asimismo, varios artistas como el maestro Fermin Salaberri, el trio Perla Negra, Stalin y Raúl Mora; y, el Papo Guerrero interpretaron varias canciones del maestro Terán.
Trayectoria
En el año de 1963 se traslada a Loja el maestro Galo Terán Arteaga, oriundo de Riobamba, sin embargo, su vida musical y familiar la desarrolló en esta ciudad, al contraer matrimonio con la señora Clemencia Ludeña y procrear a sus cinco hijos, María Cecilia, Margoth Eulalia, Galo Patricio, Miriam Clemencia y Mónica Antonieta.
Desde su llagada a Loja, la ciudad lo acogió en gran manera y le brindó la posibilidad de formarse académicamente en el conservatorio de Música Salvador Bustamante Celi, en la especialidad de guitarra, formó parte de varias agrupaciones musicales y conformó el conjunto Universitario con el cual recorrió varios países entre ellos Rumania y Japón.
Fue docente de algunos establecimientos educativos de la ciudad y del Conservatorio de Música. Se identificó con los géneros musicales ecuatorianos por lo que escribió valses, pasillos, san juanitos, pasacalles, albazos, capishcas, además de varios himnos para establecimientos educativos.
