En el barrio Lote Bonito hay un kiosco con función aparentemente social, no obstante a decir de José Paúl Luzuriaga, director de Justicia y Policía del Municipio, servía como pretexto para que personas se dediquen a consumir bebidas alcohólicas alrededor del inmueble.
Malestar
Los habitantes del lugar cansados por esta situación, que a la vez genera mal aspecto e incluso inseguridad, denunciaron ante el Municipio para que se controle. La Comisaría de Ornato procedió a notificar al propietario, tras solicitarle que se abstenga del expendio de alcohol y el producto encontrado se lo decomisó.
“Por el derecho al trabajo al propietario del kiosco se le permitió seguir allí pero que no vuelva a reincidir en la conducta de vender licor de forma indiscriminada”, argumenta Luzuriaga, no obstante se hizo caso omiso por lo que se siguió el proceso correspondiente.