El Código Orgánico Integral Penal (COIP), en su Art. 283 (Ataque o resistencia), determina que la persona que ataque o se resista con violencias o amenazas a los empleados públicos, a los depositarios o agentes de la fuerza pública, a los comisionados para la percepción de los impuestos y contribuciones, a los ejecutores de los decretos y fallos judiciales, a los guardas de las aduanas y oficinas de recaudación y a los agentes de policía, cuando obran en ejecución de las leyes, o de las órdenes o reglamentos de la autoridad pública, serán sancionadas con pena privativa de libertad de seis meses a dos años.
Agresiones
La Policía Municipal de Loja, en sus tres ramas, a diario es agredida, sin embargo a pesar de haber cumplido con todo lo establecido dentro de la ley para que los agresores sean sancionados conforme a derecho, nadie ha sido detenido, ni sancionado.
Geovanny Castro, comandante de la Policía Municipal, dice que si se quiebra el orden establecido en un país no nos queda nada. Aquí las autoridades gubernamentales deberían dar todo el respaldo interinstitucional a la Policía Municipal en su accionar diario para que actos de agresión no queden impunes, “esperemos que la sociedad haga conciencia de que la autoridad es para respetarla”, refiere.
Falta cooperación
Castro se plantea algunas interrogantes puesto que la Policía Municipal se siente sola al momento de hacer cumplir la ley. A diario se observa el maltrato no solo verbal sino físico de los uniformados, por ejemplo la noche del jueves 12 de abril, un sujeto golpeó salvajemente a un aspirante a policía Municipal con un palo y cuando uniformados fueron a ayudarlo recibieron similar agresión.
“Aquí jamás se ha hecho nada cuando tenemos policías municipales agredidos. Debemos preguntarnos ¿Qué está pasando aquí? ¿No hay apoyo de las autoridades, cumplen tal vez alguna consigna?”, cuestiona el Comandante.