De acuerdo a datos estadísticos que maneja la Unidad de Control Operativo de Tránsito, el índice de accidentabilidad ha disminuido en los últimos tres años con menos personas heridas y fallecidas. También se sostiene que la principal causa de los siniestros es por el conducir en estado etílico.
Los datos que existen indican que en el 2016 se suscitaron 494 accidentes con 232 heridos y 21 personas fallecidas, en el 2017 disminuyeron a 459 con 188 heridos y 13 fallecidos y hasta lo que va del 2018 un total de 208 sucesos con 108 heridos y 12 personas que perdieron la vida.
Juan Carlos Maldonado, jefe de la Unidad, explicó que si bien es cierto las estadísticas indican que las cifras vienen disminuyendo, no dejan de existir las consecuencias como daños materiales, muertes y heridos a veces graves o leves.
Por ejemplo en este año la mayoría de siniestros se han producido por el consumo de alcohol dejando como resultado la muerte de conductores adolecentes y jóvenes, de allí otras por exceder los límites de velocidad e irrespeto a las señales de tránsito.
Maldonado hace un llamado a los conductores a manejar con precaución y sobre todo hacer conciencia de la gran responsabilidad que demanda el hacerse cargo de un vehículo. Aseguró que por parte de la Unidad Operativa de Tránsito continuarán con los controles para evitar que ocurran accidentes en las vías.