Aunque la imagen de la ciudad mejora notablemente con el proyecto de Regeneración Urbana calles como la 10 de Agosto, Mercadillo, 18 de Noviembre y otras, se ven gravemente afectadas por la irresponsabilidad de ciudadanos que arrojan chicles a las baldosas. Esto genera doble esfuerzo al personal del Municipio de Loja, puesto que manualmente retiran estos residuos.
La ciudadanía puede darse cuenta que todo el casco céntrico ha sido renovado con el proyecto de Regeneración Urbana y eso involucra el cambio de aceras, sin embargo "hemos visto con preocupación que se arroja de manera indiscriminada gomas de mascar o conocidos normalmente como chicles, lo que desmejora las áreas intervenidas”, señaló Israel Lima, jefe de Saneamiento Ambiental del Ayuntamiento Local.
Ello ha implicado que la cuadrilla municipal, pese a cumplir barridos con la maquinaria, realice labores de limpieza de forma manual, puesto que estos residuos no salen con facilidad, ya que se adhieren a las baldosas.
Con la finalidad de hacer conciencia a la ciudadanía sobre esta problemática, personal del Municipio de Loja realiza visitas a los diferentes comercios, además, alrededor de 5000 niños de 70 establecimientos educativos se les capacitó entre otros temas, el de no arrojar chicles al piso.
Lima, hizo un llamado a que hagan uso de las papeleras que se encuentran ubicadas en diferentes puntos del centro de la ciudad, en plazas, parques y sitios estratégicos de mayor afluencia de personas.
Solo en el área céntrica, por ejemplo están ubicadas cerca de 100 papeleras. “Es necesario que en una envoltura se ubique el chicle y luego depositen en la papelera correspondiente y no al piso o baldosa”, puntualizó.
El funcionario precisó que de nada sirve que las cuadrillas realicen una limpieza en la calle Bolívar y al día siguiente nuevamente ir a la misma labor. El cambio de actitud debe prevalecer.
Se ha dispuesto un total de tres trabajadores, que se encuentran de manera alternada en los diferentes puntos de la ciudad donde se debe retirar los chicles.