Los controles que realiza la Comisaría de Higiene, en cooperación con la Policía Nacional en los bares escolares y en los exteriores de los establecimientos educativos, tienen como fin evitar la venta informal y la acumulación de gente que interfiere la movilidad de los transeúntes.
En los bares se verifica permisos de funcionamiento, condiciones higiénico sanitarias y tipo de productos que se expenden.
Santiago Reyes, comisario de Higiene, indica que desde hace días atrás se realizan estos operativos con el fin de dar cumplimiento a las recomendaciones del Ministerio de Salud Pública, que expresa que dentro de los rangos de alimentación saludable en las unidades educativas se prohibe la venta de comida chatarra.
Los controles van encaminados a constatar que los bares cumplan con las mismas condiciones higiénicas de los restaurantes, bares y cafeterías, normativas y condiciones en las que han sido elaborados los alimentos desde la materia prima hasta el producto final y garanticen que los estudiantes consuman alimentos de calidad.
La tarea se cumple a través de un cronograma de trabajo elaborado en la comisaría, las inspecciones son bien vistas por parte de los propietarios y las observaciones que realizan son aceptadas.
Se visita alrededor de dos a tres establecimientos educativos por semana con un médico veterinario y técnicos de la dependencia con el fin de garantizar que el control sea efectivo.
En la presente semana se visita establecimientos educativos que cuentan con un gran número de alumnado.