Dotar de áreas definidas para que los pequeños productores, que provienen de las parroquias rurales del cantón, expendan sus productos en forma directa, es el afán del Municipio de Loja al adecuar espacios con servicios básicos en el mercado del Pequeño Productor.
En el área existen cincuenta espacios distribuidos y señalados para que los pequeños productores expendan los productos que se cultivan en cada una de sus jurisdicciones.
Lechugas, coles, brócoli, rábano, granos, frutas y hierbas medicinales son algunos de los víveres que se comercializan directamente, a precios y peso justo, sin la participación de intermediarios y sin que exista la especulación.
Los puestos cuentan con cubierta, iluminación, bateas para lavado de productos y baterías sanitarias, servicios que garantizan la higiene de los alimentos.
Franklin Bahamonde, administrador encargado del mercado, indica que los puestos se han distribuido en forma equitativa a los productores de las 13 parroquias rurales del cantón.
La municipalidad promueve estos espacios atendiendo la petición de los agricultores de las parroquias que constantemente solicitaban un lugar apropiado para vender directamente al público.
El funcionario solicitó a los dirigentes parroquiales incentivar a los productores para que hagan uso de estos sitios que están destinados al sector productivo, a la vez invitó a la ciudadanía para que acudan a este sitio.