Un total de 4200 personas recibieron atención médica ambulatoria, hidratación, alimentos y masajes relajantes en las carpas instaladas en la Ruta del Peregrino con destino a la parroquia El Cisne y Loja.
Es la primera vez que se atendió a los romeriantes que caminan desde Azuay y Cañar hacia la basílica de El Cisne a cumplir sus promesas a la Virgen. Esta muestra de fe es una tradición en los meses de agosto y primeros días de septiembre.
A decir de Fernando Villagómez, director de Seguridad Ciudadana y Control Público, hubo tres fechas en las que se registró mayor movilización de peregrinos, el 16 y 20 de agosto y estas dos últimas semanas en la ciudad.
En la ruta del peregrino realizaron un trabajo coordinado las dependencias municipales de Gestión Económica, Turismo, Tránsito y Bomberos, que brindaron asistencia permanente a quienes arribaban a cumplir su peregrinación.
Villagómez extendió su agradecimiento a los miembros de la Policía Nacional, Fuerzas Armadas, Cinat, empresa privada que se sumaron a este trabajo y que permitió atender a los romeriantes.